viernes, 8 de julio de 2011

El terral explicado

En Málaga se conoce como terral o dicho en castizo "terrá" al viento que sopla de la tierra hacia el mar, sobre todo en las zonas del centro de la provincia y valle del Guadalhorce. En los extremos oeste despues de Torremolinos  y por el este hacia la Cala del Moral, el "terrá" desaparece y se transforma por la acción de la orografía, o sea, por los montes y sierras que desvían el viento, además de la orientación.

Por ejemplo, mientras en Málaga capital sopla viento WNW (o sea, oeste-noroeste) en la Cala del Moral y Rincón de la Victoria ese mismo viento es prácticamente del oeste, y al venir del mar viene mucho más fresco, habiendo unas diferencias de más de 10º en determinados días.

Es curioso que para explicar el fenómeno del "terrá" los meteorólogos hablan de algo llamado "descompresión adiabática" y unas cuantas teorías científicas más.
Sin embargo, mi modesta opinión es que es lo mismo que ocurre cuando en Bilbao hay viento sur y hace 33ºC, los bilbaínos se sorprenden cuando lo que pasa es que el viento del sur viene recalentado de la meseta, y al pasar por las sierras y bajar de repente hasta el mar, se calienta aún más. Acostumbrados a vientos del noroeste o del noreste, esto es para los que viven en el norte algo insólito.
Sin embargo, el terral en Málaga es cosa de todos los veranos. En invierno sin embargo, el viento del oeste o noroeste es bastante frío y no ocurre lo mismo que en verano.

En la zona central de la provincia de Málaga lo que pasa es que el viento del oeste (o "viento de poniente" porque viene del lado por donde el sol se pone) coincide en Málaga con la tierra, y la serranía de Ronda y El Torcal forman un embudo que lo desvía a noroeste, bajando el valle del Guadalhorce y recalentándose aún más.
Cuando sopla viento de levante (o sea, del este, por donde sale el sol o se levanta) en Málaga y en el valle del Guadalhorce se está más fresco porque el viento viene del mar y se refresca ya que el agua del mar está como máximo a unos 23-25º C en verano. De día la temperatura puede rondar los 32ºC pero no pasa de ahí, y de noche al no existir calentamiento por el sol, la temperatura puede descender incluso por debajo de 20ºC.
Mientras tanto, con este mismo viento de levante, en Sevilla, Córdoba y en general en el valle bajo del Guadalquivir (lo que se conoce como "la sartén de Andalucía) se alcanzan temperaturas de 40ºC con facilidad.
Y sin embargo, cuando sopla viento de poniente, oeste y oeste-suroeste, el viento sube por el valle del Guadalquivir y en Sevilla y Córdoba se llega como máximo a 33ºC refrescando mucho más por la noche que en Málaga.

Otro detalle curioso es que cuando sopla el terrá se pone el agua del mar muy fría, esto es por dos motivos, uno que al desplazar el agua de superficie hacia mar adentro, aflora el agua del fondo que está a mucha menos temperatura, y por otro la humedad relativa del aire desciende hasta casi el 10% cuando en Málaga lo normal es pasar del 60%. Esto hace que la evaporación sea muy rápida, que se puede comprobar en detalles como que la ropa del tendedero se seca en media hora y los botijos enfrían mucho más el agua. La evaporación absorbe energía y refresca.
Es lo mismo que las botellas que ponían antes los camioneros y los maquinistas del ferrocarril envueltas en un trapo mojado y atadas a la ventana del camión o locomotora. El mismo viento provoca la evaporación y refresca la botella.
 Y si estamos en la playa, nos da sensación de frío si estamos mojados y nos quedamos a la sombra. Y todo se debe a la humedad tan baja que tiene el terrá.

No tengo información de Almería, Cádiz, Granada, Jaén o Huelva. Lo que digo es fruto de la experiencia personal y se puede comprobar científicamente con los datos de las estaciones meteorológicas correspondientes.

A ver si los señores meteorólogos se lo aprenden ya de una buena vez y dejan de decir tonterías cuando hablan de temperaturas en Andalucía.